viernes, 12 de abril de 2013

"No tengo nada que perder, sólo el miedo a la soledad"

          CONFIGURACIONES SEGÚN LAS FIGURACIONES              
                        SOLIVIANTO   Y   TREMOLO                                  
Si queréis saber quién sugiere y enmimbra, quién llama, miradme las palabras, su calcio y sus fisuras, el palio de la voz, la reunión de los gestos intervivo: qué ambrosía desde los adentros sostenidos, el tanto suspirar por lo que nunca dejase ni se tiene,estremeciéndose en trémolo para contestarle a la muerte viéndose el rostro en su pupila. Cuántos martirios gozados como sartenes humeando y ese aire de un águila pendiente y este amor al papel y ala tinta, oh río sonorizándose con todo el corazón hecho un alarido a matacaballo.      
Y la paciencia,  en vela y calambre, armando calideces. Y los costados conteniendo la trifulca de la sangre térrea,su reliquia penitente, íntima, idealizada de sed, para que el mundo sea un saludo a cada instante en su metáfora. Y de cada lagrima agria  y fósil oid que nace otra garganta en trébol y bocajarro. Dejo en el sueño  y su figuración primera una escala idílica, herrabunda y etérea. Me quemo como un barco: estas son mis pavesas aventasadas, avante claro, los sones avutardas del olvido hablando como un cirio. Escuchad lo que dicen barajando los colores terciopelos y lavando las heridas, urgiendo las palabras nacidas de la arena y sus títulos, porque todo poeta es un taifa destinado a ser carne de alegría zarandeada y cuando piensa en su encelo planetario siente librar por sus huesos mariposas y puyas.                                                                                    

 
    

1 comentario:

  1. "Qué difícil intentar salir ilesos de esta magia en la que nos hayamos presos."

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